viernes, 8 de agosto de 2014

ANÁLISIS DE ESPAÑA

Sludos.

Va bien España, desde el año 2006 se destruyeron un millón de puestos de trabajo, pero se han creado medio millón de puestos de trabajos nuevos y distintos, diferentes.

El objeto de los minijobs es imitar el tratamiento que de ellos dan alemanes y norteamericanos.

El minijob no es un único trabajo.

El minijob es realmente tu minijob de por la mañana, tu minijob de por la tarde y tu minijob de los fines de semana.

De esa manera tienes tres trabajos y juntándolos todos tienes suficiente dinero.

Es una idea para garantizar que la precarización del trabajo por ley de oferta y la demanada de la que no es responsable ningún gobierno y en todo caso el sistema económico neoliberal, te permita ganarte bien tu vida.

El problema empieza cuando sólo has conseguido un minijob a 300 ó 400 euros, de media jornada. Y no has conseguido ningún otro, a lo sumo un trabajo para los findes.

De esa manera el joven todavía no se puede independizar.

El joven tiene que verse obligado a compartir piso, rentar una habitación a 150 o 200 euros y tener 100 euros para sus gastos, comiendo quizás en la casa paterna de origen. Es una situación precaria de la que sólo puede disfrutar alguien muy joven sin cargas familiares ni mascotas que cuidar y sin relaciones parásitas. Eso hace muy egoísta a la juventud, algo rentida, de sobra resabiada y muy precaria.

La mentalidad imperante es que se cobre más dinero por el minijob de media jornada, al menos el sueldo mínimo que en España está en 636 euros. Pero es el sueldo por una jornada de 8 horas no por una joranada de la mitad, porque el sueldo mínimo de media jornada son 320 euros o en torno, luego relamente es un minijob el trabajo a media jornada.

SUBIR EL SUELDO MÍNIMO SERÍA SOLUCIÓN PARA EL TRABAJO A MEDIA JORNADA

Y con dos minijobs a media jornada se puede vivir rentando un piso, y una pareja los dos con trabajo incluso precario podrían hasta pensarse en formar una familia, si tuvieran ventajas de los Servicios Sociales del Estado, que creo quie de existir, existen. Las ventjas fiscales son cómo las brujas, que haberlas, haylas.


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